El robo

Llegado el momento se apagaron las luces de la calle, era la hora, no podía entretenerse un solo segundo, en apenas treinta minutos sonaría el despertador en la casa y si seguía en ella estaría perdida, el trabajo no era difícil, entrar, buscar la bolsa y sacarla de la casa, no tendría una segunda oportunidad, la vida del inspector corría peligro mientras aún tuviera eso en su caja fuerte, ellos irían a buscarlo, ellos  le habían concedido la oportunidad de que fuera ella quien lo recuperara para que no hubiera más muerto pero no las tenía todas consigo...

Mientras subía por la pared vio como una luz se encendía, no, no podía ser, él tenía que estar dormido, sacó una pequeña botella negra del bolsillo junto con un pañuelo blanco, puso dos gotas  del líquido que la botella contenía y entró cautelosamente por la ventana de una habitación de invitados... habitación que un día fue suya, se agazapó tras la puerta entreabierta del baño y en cuanto tuvo oportunidad durmió al inspector con el cloroformo de su pañuelo "lo siento padre, tenía que hacerlo" una lágrima recorrió su mejilla pero no tenía tiempo para sentimentalismos.

Diez minutos después tenía la bolsa en sus manos, su padre no había cambiado la caja fuerte de sitio, ni siquiera había cambiado la contraseña, la metió en una pequeña mochila y se dispuso a salir por la ventana por la que había entrado pero no puso, necesitaba ver a su padre una vez más, hacía tres años que no sabía nada de él, ella era una persona muy buscada en el país, no había matado a nadie, había incumplido alguna ley pero nunca o casi nunca para hacer mal a nadie, su padre era la persona encargada de buscarla...

Una vez fuera del edificio se quitó la capucha y los guantes a la vez que se ponía un bonito abrigo, sacó el móvil y las llaves del coche, y mientras se subía a su Porche marca el número de su contacto.

- Lo tengo - dijo nada más escuchar que descolgaban - hora y lugar.

- Media hora, en el parque de la última vez - la voz al otro lado del teléfono sonaba distorsionada - no llegues tarde y no intentes jugarmela o todos morirán

- Allí estaré - colgó rápidamente, la vida de su padre estaba en sus manos, ojalá solo fuera la de su padre... su marido y su hija recién nacida habían desaparecido justo antes de que le encargaran la tarea, tenía que salvarlos...