jueves, 4 de abril de 2013

Jardines

Día lluvioso, los olores se pegan a las gotas, los árboles crean una selva cerrada, oscura y fresca, especies de todo el mundo te rodean, Europa, Asia o Australia, el paisaje de todos los continentes te rodea, caminas con senderos escondidos, cruzas por puntes de ensueño, de pronto un claro entre los bambúes te deja ver un ave del paraíso, el bosque negro vuelve a hacerse denso, te rozan la mano y un escalofrío te recorre el cuerpo, un beso robado entre altas palmeras, a tu derecha aparece un estanque, al fondo un cenador corona la montaña, desde allí contemplas toda la ciudad, sigues el cauce del río hasta un punte distinto, parece más antiguo que los demás, mas recogido, más romántico, es el punte de los enamorados, uno, dos, tres besos contra la barandilla de forja, tiran de ti, subes una colina coronada por un palacio, allí hace tiempo que nadie vive pero tu imaginación vuela, imaginas una mañana salir de esa casa  y sentarte a contemplar el parque a tus pies, giras a tu izquierda, una estructura de hierro inundada de florecillas moradas, glicinias, los árboles de alrededor también han sido invadidos por las flores, el suelo está cubierto por un manto rosaceo, cruzas lentamente y frente a ti se abre una cascada en la roca, a sus pies cientos de costillas de Adan plantas amables que dejan pasar la luz dejando crecer más vida a sus pies, cientos de historias, mitos y leyendas te rodean, increibles, seductoras. Finalmente comienzas a descender la colina, lentamente, saboreando cada olor, cada color, cada imagen, hace tiempo que paseas de la mano, si esto no es el paraiso... se le parece

martes, 2 de abril de 2013

El accidente

Las cortinas apenas dejaban pasar la luz, pero hubiera dado igual, en la habitación del hospital no cabía un alma más, la buena noticia había inundado los teléfonos móviles de los presentes apenas unas horas antes, la joven Alicia por fin había despertado de su largo letargo que comenzó un viernes por la noche cuando ella y sus amigas volvían de una fiesta en un pueblo cercano, si fue culpa de la chica que conducía o del joven que iba en el otro coche nunca estará claro puesto que ninguno de los conductores podría contarlo nunca, lo que si se sabía es que el alcohol era compañero de viaje en ambos vehículos.

Dos años antes, Alicia y tres amigas decidieron ir a las fiestas de un pueblo a 20 km de donde vivían, acababan de terminar las clases y era la primera fiesta para desconectar de exámenes, horarios y padres, el verano pintaba genial, Alicia, la pequeña del grupo, acababa de terminar el bachiller, era buena estudiante y la media le daba así que decidió meterse a arquitectura a pesar de lo que sus padres le decían "No tiene salidas, ahora apenas hay trabajo para los arquitectos" "acabarás dando clase de dibujo o matemáticas en un instituto" sus amigas, Lucía, Julia y Clara eran dos años mayores que ella, Lucía acababa de terminar el grado superior de informática, Julia estudiaba medicina y Clara estaba en Biología, habían decicido irse todo el mes de agosto de interrail, iba a ser genial, las cuatro amigas juntas todo el mes recorriendo Europa.

La noche empezó bien, hacía calor, las cuatro iban con vestidos, guapas, felices, sexys, el padre de Clara le prestó el coche a condición de que si bebía se quedaran allí hasta la mañana siguiente, como para prácticamente cualquier grupo de jóvenes la advertencia fue un mero susurro que no llegó a traspasar el tímpano de la chica, en el coche las cuatro iban bebiendo, era más barato hacer botellón que luego pagar copas que podían salir perfectamente por cinco o seis euros si no más, cuando llegaron al pueblo algunos amigos suyos ya estaban alli, se pasaron varias horas bebiendo, fumando, ligando y bailando, a eso de las siete de la mañana Lucía apenas se tenía en pie por la borrachera así que las amigas decidieron irse a casa, Julia no estaba muy de acuerdo con que Clara cogiera el coche pero tenía sueño y los pies destrozados así que se subió al coche sin rechistar.

Más o menos a medio camino empezó a llover, no se veía mucho, de pronto algo impactó en la parte delantera del coche, todo se quedó negro para las amigas, la policía, los bomberos y la ambulancia tardaron media hora aproximadamente en llegar al lugar del accidente, entre los dos coches siniestrados había seis personas, por tres de ellas no pudieron hacer nada, el chico que conducía el otro coche, Clara y Lucia, las dos que iban sentadas delante, las otras tres personas fueron trasladadas al hospital Julia apenas tenía unos rasguños y un mes después estaba en casa lamentando haber dejado a su amiga coger el coche, Alicia quedó en coma y la otra chica, la del otro coche falleció un mes después en el hospital.